lunes, 24 de noviembre de 2014

Somos el espejo en que se miran

Buenos días yoguis!!

El post de hoy está dedicado a todas aquellas mamás, papas, tíos, tías, abuelas  y todos aquellos que tenéis pequeñajos a vuestro alrededor.
Seguramente no os voy a descubrir nada nuevo pero no está demás recordar la importancia que tienen nuestros actos en la vida de los que nos rodean, sobre todo de las nuevas generaciones.

Yo tengo un hijo de ocho años. Cuando comencé a cuidarme de una forma más seria y continua una de las razones fue él, pensando que el día de mañana voy a poder disfrutar de el y el de mí con una mejor salud.
Pero además se produce el efecto secundario de que si yo me cuido el se cuida. Y así, sin pretenderlo directamente, le estoy enseñando a querer y respetar su cuerpo para así poder disfrutar de una mejor calidad de vida. Porque no hay mejor manera de enseñar que siendo ejemplo.

Por eso hoy quiero compartir con vosotros unos pequeños tips o trucos, como lo queráis llamar, que a lo mejor algún día os pueden venir bien y poner en práctica. A mi me funcionan.

Ir caminando a los sitios. Algo tan sencillo y que en los últimos años está en "vías de extinción".
No digo que no use el coche pero intento que sea las menos veces posible. A el desde pequeñito le hemos acostumbrado a ir andando y lo ve tan normal, sólo hace falta calcular los tiempos que nos hacen falta y listo. Además he comprobado que desde mi casa, vivo a las afueras, al centro del pueblo se tarda lo mismo andando que en coche.
Para ellos también puede ser atractivo ir en patinete o bicicleta, también ejercitan su cuerpo y van más rápidos.



Los fines de semana, paseo-excursión fijo ( siempre que el tiempo lo permita).
Descubrir bichos, tipos de hojas, tipos de árbol, hacer una cabaña de palos, pequeñas carreras, observar la naturaleza y la climatología (que a mi me encanta), tirar piedras a un estanque intentando hacer saltos de rana, etc, etc.



 Hay infinidad de maneras para motivarles a caminar y moverse! Guerra de hojas en otoño, de nieve en invierno..... Todo eso con un buen bocata o fruta y agua, hacen la actividad perfecta.

Por cierto sabéis que nuestro cuerpo está formado por un 70% de agua verdad! seguro que lo habéis oído unas cuantas veces.
Personalmente respeto la manera de vivir de cada uno ( siempre que no me afecte, claro), pero me entristece ver a niños, desde bien pequeños, acompañando sus comidas con refrescos, bebiendo zumos de tetrabriks, etc. A estas alturas ya sabemos que son "azúcar puro" y que no les hace ningún bien. Hay que pensar en las consecuencias a largo plazo.

Para motivarles a comer verdura.
Además del siempre socorrido puré, podéis probar esta otra forma. Yo los llamo picadillo de pescado o de carne y consiste en lo siguiente. En un bol ponéis hojas de lechuga, unas hojas de espinaca cruda, pimiento asado a tiras, etc, etc. Y así todas las verduras que se os ocurran. Aunque personalmente no os recomiendo más de cuatro, ya que se distorsionan mucho los sabores, pero eso sí que la lechuga esté siempre. Después solo tenéis que añadir o bien una lata de atún escurrida, o unos filetes de pollo a la plancha cortados en tiras, o cualquier otra carne o pescado que os guste. Eso si sin huesos ni espinas.
Cuando ya lo tengáis todo el bol con una tijera vais contando, cortando, cortando, hasta que quede lo suficientemente menudo para que no se distinga bien lo que es, pero no tan picado como para que se haga un puré.
Para terminar le añadís una salsa, puede ser comprada o casera que será mejor todavía. No hace falta echar mucha, ya que enseguida, al darle vueltas, se amalgama todo.
Y ya tenéis el picadillo hecho, lo podéis utilizar en bocadillos, tostadas, o fajitas.
Gracias a este tipo de picadillos, mi hijo por ejemplo prefiere la espinaca cruda a cocida, y en todos
sus bocadillos tiene que llevar lechuga, espinaca o algo verde. Ya que de esta manera poco a poco cuando se van acostumbrando al sabor de las verduras, ya podéis hacer los picadillos de una o dos verduras solo y a ellos les gusta igual. Incluso después ya asocian el sabor y se comen la verdura sola y entera sin problema.

Para que coman fruta.
Con la fruta desde siempre he tenido problema para que se coma una al día por lo menos. Así que alguna vez he tenido que recurrir a estos dos trucos que os comparto. Uno es, pelando y cortando
varias frutas hacer algún tipo de composición en un plato llano, un dibujo. Un barco, un árbol, una carita, un muñeco, etc. Echándole imaginación y paciencia, se pueden hacer auténticas obras de arte. Y por alguna extraña razón se lo comen más a gusto.
Otro truco es un juego para dos. Se cortan tres rutas diferentes, mismo número de trozos en un plato. Después a cada fruta le asignas dos números ( A la primera fruta el uno-dos, a la segunda fruta el tres-cuatro, a la tercera fruta cinco y el seis.). Ahora sólo necesitas un dado. El juego consiste en que cada
vez que tira el dado uno de los dos participantes y se come un trozo de fruta que corresponde al número que ha salido. El jugador que antes se coma sus frutas gana.
No es que me guste utilizar los juegos para que coma la comida, pero alguna vez he usado este para que pruebe alguna fruta que de principio no quiere. Y funciona.

Para que aprendan a colaborar en las tareas de la casa.
Sobre todo si son chicos, me parece bueno que desde pequeños vayan colaborando, en la medida de lo que puedan, en las tareas del hogar. Personalmente pienso que las tareas del hogar son responsabilidad de todos los que habitan en el, independientemente del sexo, de la edad y el trabajo que se tenga fuera de casa. Tan sólo hay que ser consecuente con el porcentaje de tiempo que cada uno le puede dedicar a ellas. 
Por eso me parece importante que desde pequeños colaboren teniendo asignada alguna tarea y colaborando con los demás miembros de la casa a realizar otras. Sólo así aprenderán a valorar y a respetar el trabajo que hay que hacer en una casa.

Para qué respeten el planeta.
Además de pasear y descubrír cosas, intentamos reciclar todo lo que podemos. Enseñarle a usar las papeleras (es algo que parece ser muy difícil para la mayoría de la gente).
A mi me gusta decirle que todo lo que ve lleva muchísimos más años que el y que tiene que seguir estando muchos más.



Para qué cuide su cuerpo.
Además de enseñarle a comer lo mejor posible, que en eso estamos todos aprendiendo constantemente, incitarle a que practique algún tipo de deporte, de vez en cuando practica yoga conmigo y algo de meditación también hacemos.
Pero sobre todo intento transmitirle el respeto y amor que nuestro cuerpo merece, a aceptarlo tal y como es. Como comprenderéis en un niño estos conceptos son complicados de explicar y de entender, pero por eso mismo tenemos que ser el mejor ejemplo.


Ya os he dicho al comenzar que no os iba a descubrir nada nuevo hoy, pero creo que es algo en lo que debemos pensar, sobre todo si tenemos pequeños a nuestro alrededor.
Nuestras acciones nos afectan a nosotros y a los que nos rodean. Así que hoy os invito a reflexionar sobre vuestras acciones y que penséis en la repercusión que tienen en las personas que tenéis a vuestro alrededor, sobre todo si tenéis niños cerca.

Y no os martiricéis si en algo no sois lo suficiente buen ejemplo, nadie somos perfectos y nadie estamos libres de meter la pata. Pero si aprendemos a aceptar nuestros errores y pedir perdón cuando haga falta también les estamos enseñando una buena lección.

Espero que el post de hoy os sirva para algo y que tengáis un buen comienzo de semana. Muchas gracias por estar ahí y nos vemos el viernes!!

Blanca.






2 comentarios:

  1. Magnifico!!!!!no podria star mas de acuerdo contigo blanca....
    Me encantan estos posts....y q conste q no tengo niños xo eres tooodo inspiracion!!!!

    ResponderEliminar